Palabras del presidente del Senado, Eduardo Estrella, en la visita oficial del presidente de la República Portuguesa

Santo Domingo-RD-23-03-2023.-Le damos la más cordial bienvenida en este magno Salón de la Asamblea Nacional, al excelentísimo señor presidente de la República Portuguesa, Marcelo Rebelo de Sousa, quien junto a su delegación, nos honra con su presencia.

Valoramos sobremanera que usted haya viajado más de 6 mil kilómetros para llegar a esta tierra de Duarte, Sánchez y Mella, llena de gente hospitalaria y alegre, que le recibe con los brazos abiertos.

En esta, la “casa de la democracia dominicana", nos sentimos altamente regocijados, porque con su visita, se fortalecen los lazos de hermandad que, desde hace siglos, unen a Portugal y la República Dominicana.

Desde que inició el vínculo entre nuestros países en 1883, hemos desarrollado diferentes acciones, las cuales se han materializado en convenios importantes, beneficiando a los ciudadanos de nuestras naciones.

Celebramos los pasos de avance y cooperación entre ambos pueblos, que hoy se robustecen con las firmas de acuerdos sobre educación, energías renovables, agroindustria y municipalidad.

Señoras y señores, aunque estamos en diferentes continentes, nos une un puente de prósperas conexiones comerciales, permitiendo que nuestras economías interactúen en una relación de ganar ganar, en la cual se destacan las exportaciones dominicanas de material textil y de calzado, nuestro exquisito ron, además del mejor de los puros hechos a mano y el plátano cosechado en nuestras tierras, entre otros importantes productos.

Asimismo, Quisqueya se beneficia con las importaciones que recibimos desde el territorio portugués, que van desde medicamentos, papel y cartón, unidades digitales para máquinas automáticas, además de otros artículos que son de interés y de alta demanda para el mercado local.

República Dominicana y Portugal tienen diferentes culturas, distintas tradiciones; sin embargo, en uno de los momentos más retadores para el mundo, demostramos tener un relevante valor en común: la resiliencia que pudimos manifestar frente a la pandemia del Covid19, logrando que nuestros pueblos tengan una destacada recuperación económica, elogiadas por organismos internacionales.

Señor presidente Marcelo Rebelo de Sousa, sus siete años de gestión en Portugal se han caracterizado por mantener la gobernabilidad, la paz social y velar por la estabilidad económica de los portugueses, lo que le ha llevado a ganarse el respeto de su gente por la coherencia de sus convicciones, firmeza y, por supuesto, su notable sensibilidad y cercanía con su pueblo.

Su amplia trayectoria política, jurídica y en la comunicación, además de sus valores y principios cristianos, consolidan su liderazgo en la República Portuguesa, lo cual trasciende internacionalmente.

Damas y caballeros, ante la realidad que viven nuestros países, en donde coexisten visiones diferentes, la colaboración y concertación, son elementos esenciales en la búsqueda del bien común. Esa es una de las tantas enseñanzas que nos ha dejado el papa Francisco, cuando ha dicho, y cito: “Hace falta volver a sentir que nos necesitamos unos a otros, que tenemos una responsabilidad por los demás y por el mundo, que vale la pena ser buenos y honestos”.

A propósito de esta gran frase, que debemos aplicar hoy más que nunca en nuestra región y el mundo, nos permitimos apelar a usted, señor Presidente, por su trayectoria de bien y su gran liderazgo ante la Unión Europea, para solicitarle que interceda ante los Gobiernos de esos países amigos, sobre la imperiosa necesidad, de que la comunidad internacional vaya en ayuda de Haití a la mayor brevedad posible, a los fines de que nuestro hermano pueblo haitiano, recupere la paz social y la democracia.

Señor presidente De Sousa, las dominicanas y dominicanos siempre estaremos prestos a acogerles a usted y a sus compatriotas, para que disfruten de nuestra cultura, música contagiosa, sabrosa gastronomía, paradisíacas playas, y sobretodo, que reciban de nosotros la mayor riqueza que poseemos: el trato afable y el calor humano que nos distingue.

Que Dios bendiga a los pueblos portugués y dominicano.

Que Dios nos bendiga a todos

Muchas Gracias!